En esta época, la humanidad esta empezando a comprender la vida como un acontecimiento completamente ligado a la espiritualidad, y en algún sentido, eso permite saber que se puede generar un cambio verdadero, en consecuencia la ansiada transformación.
La armonía, la magia, la alegría son bondades que es posible percibirlas en todo momento. La energía fluye por cada ser que habita sobre esta gloriosa tierra, por lo tanto todos son dignos de vivir en plenitud y está a un paso, tan solo basta contemplar con los ojos del corazón.
Se puede elegir una bella forma llevar la vida, que garantiza bienestar al saber que nada esta determinado, nada de lo que se desenvuelve está definido, y nada se traduce a un fin, ya que cada uno puede moldear lo que acontece pues nada ha finalizado, todo esta sujeto a cambios.
Cada uno trae consigo un poder, es el poder de cambiar, ahora bien es necesario aplicarlo cuando se presentan aquellas situaciones en que la resistencia ha bloqueado la energía, generando conflictos internos y externos, es momento cuando la vida invita a generar esa transformación tan necesaria que finalmente es la que libera.
El propósito de estar aquí en este plano es religar, con el fin de ejercer todo el potencial interno, pero para llevarlo a cabo se debe pasar por los extremos y acumular experiencias que indiquen que es lo que inmoviliza, que es lo que no permite cambiar y finalmente llegar al equilibrio donde todo fluye y se concreta.
Es momento de ampliar los horizontes y saber que cada uno cuenta con la libertad de manejar la energía a voluntad e impulsarse hacia otro nivel, tal vez se subestima que todo está creado con sustancia divina, por lo tanto no se trata de creer o no creer, sino meditar cuanta grandeza se podrá alcanzar con solo ser conscientes de la realidad del cambio.
Es momento de que el corazón sea libre, encuentre terreno fértil y brille con su luz infinita, con la fuerza del sol y poco a poco ir viviendo y sintiendo a flor de piel el cambio, la transformación verdadera.
Entonces, se puede elegir vivir momentos preciosos, momentos únicos que marquen diferencia, tan solo conectándose con el tesoro que hay dentro, con lo intrínseco que mora en las profundidades, siempre silencioso y presente.
Todo se convierte en algo extraordinario y posible para el corazón de aquel que esta dispuesto a cambiar, a crear una nueva realidad y sacar a relucir todo lo que Es, entonces el pleno poder interno comienza a hacer verdaderos milagros.
Es necesario que la vida transforme a los seres y los conduzca al mayor bien.
Por Marisol Garrido
